Por
Kenneth Alfredo Cubillo Jiménez
Académico DER
“La verdadera educación consiste
en obtener lo mejor de uno mismo”
Mahatma Gandhi
Al ser las 4:00 a.m., Graciela salió de su casa en Quebrada Grande de Tilarán. Antes de salir, besó a su hijo y se despidió de su papá. De ahí, primero en moto y luego en autobús, le esperaba un recorrido de 128 kilómetros para llegar a la Escuela Salvador Villar en La Cruz, donde comenzó su último año del Bachillerato en Educación Rural I y II Ciclos.
A un tantito menos de quinientos kilómetros de distancia, Elías salió desde su comunidad, en La Casona de Coto Brus, con destino al Colegio Nocturno de San Vito, para iniciar la licenciatura, junto con 25 compañeras y compañeros.
Ese mismo día, al amanecer, Rosita, vecina del Amparo de Los Chiles, se alistó con mucha ilusión. Solo ella sabe lo que ha vivido para agradecer por la oportunidad que tocó a su puerta. La U pública llegó a su vida y a la de sesenta y dos personas en este cantón alajuelense, quiénes al ser las ocho de la mañana empezaron, en la escuela Mélida García de este cantón, su aventura universitaria.
Y así, desde diversos rincones del país, el pasado 22 de febrero, con ilusión y esperanza, daban inicio las sesiones presenciales del primer ciclo lectivo 2025. Más de 300 personas se forman en la carrera de Educación Rural I y II Ciclos que imparte la División de Educación Rural (DER) del Centro de Investigación y Docencia en Educación (CIDE).
Para este año, nuestra unidad académica oferta la carrera en las siguientes zonas:
- Grupo 18 -Coto Brus
- Grupos 19 y 20 -La Cruz
- Grupos 21 y 22 -Upala
- Grupos 23 y 24 -Los Santos
- Grupos 25 y 26 -Los Chiles (nuevo ingreso)
- Grupo 27 -San Carlos (nuevo ingreso)
De igual manera, continúan en la etapa final de su formación, en la realización del trabajo final de graduación, estudiantado de las siguientes zonas rurales costarricenses:
- Grupos 12 y 13 -Los Chiles
- Grupos 14 y 15 -Lepanto
- Grupos 16 y 17 -Guatuso
En nuestra carrera, cada inicio se ciclo lectivo se constituye en un amanecer cargado de…
...ilusión y esperanza.
...compromiso y entrega.
...desaprender y aprender.
...de deconstruir y construir.
...vivir y convivir.
...soñar y hacer realidad los sueños.
...crecer personal y profesionalmente.
...practicar el compañerismo y solidaridad.
...exigirse al máximo, con responsabilidad y transparencia.
...ser desde el sentir, pensar y corazonar la Vida.
Y así, hacemos vida la misión de ser Universidad Necesaria.